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El traumatismo dental infantil

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Uno de los asuntos de consulta dental urgente son los traumatismos dentales, y en el caso concreto de la población infantil, se trata de un problema odontológico bastante común. La explicación es bastante simple, primeramente cuando el niño comienza a caminar, su falta de estabilidad, de coordinación, su inseguridad o la falta de miedo por la exposición a potenciales peligros y más tarde durante su etapa escolar o adolescente por la práctica de juegos o por la utilización de juguetes como patinetes, monopatines o por la participación en actividades deportivas, sobre todo de contacto como fútbol, rugby, baloncesto, etc., todo ello hace que las estadísticas sean bastantes altas. 

Otras causas importantes de producción de traumatismos en las diferentes edades son los accidentes de tráfico, caídas involuntarias, maltrato o violencia doméstica, etc. Se estima que el porcentaje de traumatismos en los niños con dientes de leche, el 50 % de ellos habrá sufrido alguno antes del fin de los estudios primarios, mientras que en personas con dientes definitivos el porcentaje de traumatismos ha ido aumentando en los últimos tiempos, pasando de un 20 – 30 % en los años 90, hasta el 20 – 58 % en el año 2003.  

¿Qué entendemos por un traumatismo dental?

Un traumatismo dental es una lesión producida por un fuerte golpe que puede afectar a una pieza dental y sus estructuras adyacentes como el hueso, la encía, dentina… pudiendo producir lesiones en los tejidos dentales duros, en los tejidos periodontales o en los tejidos de soporte de los dientes, provocando la movilidad de uno o varios dientes, lesiones en el esmalte y la dentina, fractura parcial en la corona dentaria, pérdida de uno o varios dientes, modificación de la posición del diente, heridas en la cavidad bucodental, lengua, labios… 

Lógicamente, no es lo mismo un traumatismo producido en una dentición de leche o temporal, donde la fractura va a comportar una alteración temporal de la pieza dental hasta que sea recambiada por la pieza dental definitiva correspondiente, que el traumatismo provocado en una pieza dental que ya es permanente, ya que esto comportará una alteración en dicha pieza dental de por vida. En la actualidad el efecto estético puede ser minimizado gracias a los tratamientos estéticos, los cuales dependerán de la gravedad de la situación, pudiendo ser desde la colocación de carillas, colocación de una corona o incluso la realización de un implante dental en el caso de pérdida total de la pieza dental.

Generalmente, ante un traumatismo dental las piezas dentales más afectadas suelen ser los incisivos centrales de la arcada superior. 

¿Cómo actuar ante un traumatismo dental?

Como dijimos anteriormente en el caso de producirse un traumatismo dental de debe acudir lo antes posible a la consulta de un odontólogo. En este sentido, si vosotros no tenéis ninguno de confianza, sobre todo para vuestros pequeños, nosotros os recomendamos la clínica dental Mesiodens, dado que su equipo de profesionales multidisciplinares sabe atender y tranquilizar a todos sus pacientes, incluidos los niños, quienes suelen tener miedo a estas visitas, y lo hacen mientras ofrecen el mejor servicio de odontología integral a sus pacientes, contando siempre con la mejor formación y los últimos avances dentales.

Mantener la calma es fundamental, es posible que ante esta situación se presente dolor y un abundante sangrado. En este caso se debe enjuagar la boca con agua a temperatura ambiente y aplicar presión para detener la hemorragia. Si el diente se ha salido de su orificio se debe recoger, intentando no tocar en ningún caso la raíz del diente, y enjuagarlo con agua, en el caso de que esté sucio e intentar colocarlo y mantenerlo nuevamente en el orificio bucal. Si esto no fuese posible se colocará el diente en un recipiente con leche, suero fisiológico o con agua y se acudirá de inmediato a la consulta de urgencias de un especialista, con la finalidad de intentar colocar y reimplantar el diente en su lugar, si ello fuese posible. Si el traumatismo afectó al nervio o a la raíz del diente, lógicamente el pronóstico empeora.

Si la pérdida es de una pieza dental de leche no será necesario su reimplantación, pero sí su valoración por un especialista y la realización de un posterior seguimiento. 

Las caries, otro de los problemas más habituales

Otra de las causas que mayores consultas dentales infantiles ocasionan son las caries. Su origen en los dientes de leche se debe a diferentes causas: introducción de líquidos azucarados en el biberón, quedarse dormido succionando el biberón, bebidas a base de zumos de frutas, golosinas, dulces, etc. lo que hace que una parte de estos alimentos azucarados quede sobre la superficie dental produciendo ácidos que atacan y destruyen el esmalte dental, por lo que se recomienda cambiar los hábitos alimentarios, evitando los azucares y manteniendo una estricta higiene dental.

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