¿Quién ha dicho que la montaña es aburrida? Desplazarte a la montaña te permite realizar una serie de actividades, acompañado de los tuyos, en contacto con la naturaleza, que abre la oportunidad de vivir aventuras cargadas de emoción y adrenalina. Te comento algunas de ellas.
Aparte de las vacaciones de verano, solemos efectuar algunos viajes y escapadas a lo largo del año. Trasladarnos a un lugar cercano, al entorno rural, es una de nuestras opciones preferidas. El campo y la montaña, además de desconectar de la rutina diaria, nos permiten efectuar una serie de actividades deportivas que nos reportarán momentos divertidos y enriquecerán nuestra vida con experiencias nuevas.
Realizar estas actividades, en compañía de tus seres queridos, refuerza los lazos familiares. Hará que tu pareja y tus hijos se sientan más unidos a ti, y tú más unido a ellos. Son esos momentos que quedan para el recuerdo. Que años más tarde volverán a tu memoria y despertarán una bonita sonrisa solo con recordarlos.
Estas son algunas actividades singulares que puedes realizar en una de esas escapadas a la montaña:
Salto en tirolina.
Las tirolinas son desplazamientos sobre el vacío, en el que el usuario recorre un trayecto, suspendido de un sistema de arnés y cuerdas de seguridad, deslizándose por un cable inclinado sujeto a dos puntos. A pesar de su aparente riesgo, son instalaciones completamente seguras.
En las montañas de Sobrarbe, en el Pirineo Aragonés, tenemos una de las tirolinas más conocidas de Huesca. Los gerentes de Tirolina Ordesa Pirineos, la empresa que gestiona esta actividad, se inició en el turismo rural allá por 1990, abriendo un alojamiento rural llamado el Balcón del Pirineo. Según nos cuentan, fue la insistencia de los huéspedes por efectuar actividades diferentes en la montaña lo que les llevó, años más tarde, a programar la tirolina. Hoy es una de las atracciones más populares en la comarca.
Tenemos cientos de tirolinas estables dispersas por toda España. Han sido instaladas por personas conocedoras del terreno, partiendo de un profundo respeto por el entorno natural. Para instalarlas deben seguir estrictas medidas de seguridad. Se trata de una de las instalaciones de aventura que menos siniestralidad presentan.
Lanzarse en tirolina es toda una experiencia. Parece un deporte de riesgo, pero no lo es. Todas las posibles complicaciones están previstas. En el punto de salida siempre hay un monitor que se asegura que la persona se coloca correctamente el arnés y comprueba los mosquetones de seguridad.
En el punto de llegada, se encuentra otro operario que se encarga de recibir al usuario, desconectar el equipo y hacer llegar el carro deslizador al punto de partida.
Gran parte de las tirolinas que hay en nuestro país son aptas para niños mayores de 4 años, con un peso superior a los 40 Kg. Un detalle que indica la seguridad de estos aparatos.
Para usarlas se recomienda no mirar al suelo, para evitar mareos y posibles episodios de vértigo, y dejarse llevar por la experiencia.
Barranquismo.
Pedro González del Tánago, guía de montaña, explica a la revista Web Consultas que el barranquismo es una práctica deportiva que consiste en bajar un barranco, un desfiladero o un cañón entre montañas utilizando técnicas de avance horizontal y vertical.
A diferencia de la tirolina, de la que hemos hablado antes, el barranquismo sí puede ser un deporte peligroso. Si bien, debemos partir de que existen descensos con diferentes niveles de dificultad. Aptos para diferentes públicos. Antes de acometer uno de ellos, es recomendable informarse adecuadamente.
Lo mejor de esta actividad es que suele estar programada y guiada por practicantes expertos de este deporte. Los cuales se hacen responsables del bienestar e integridad física de los participantes. Tomando todas las medidas de seguridad oportunas para que la experiencia sea gratificante.
La práctica del barranquismo en España es relativamente reciente. Se introdujo en nuestro país a finales de los años 90. A pesar de ello ha alcanzado una relativa popularidad. Creándose clubs y empresas que programan actividades de este tipo por todo el país.
Con el barranquismo podemos descubrir entornos naturales únicos y acceder a rincones recónditos que solo se pueden conocer con estas técnicas. El barranquismo suele ser una combinación de diversas prácticas deportivas en la naturaleza. Como el senderismo, el rafting e, incluso, la natación.
La práctica de esta actividad reporta grandes beneficios para la salud. Nos permite quemar calorías, aumentamos el tono muscular, trabajamos la fuerza y la resistencia y nos ayuda a combatir el estrés y la ansiedad debido a la liberación de adrenalina que se experimenta en los momentos más intensos de la expedición.
Rafting.
El rafting es una actividad deportiva que consiste en descender el cauce de los ríos, en sentido de la corriente, a bordo de una balsa neumática. Para ello, los participantes se ayudan de remos con los que controlan la dirección de la embarcación para sortear los obstáculos que encuentran en el camino.
Se trata de una de las actividades en la naturaleza más populares. No podemos eludir que a algunas personas les infunde respeto. Les parece una práctica peligrosa. Pero se trata de una actividad bastante controlada.
Para empezar, según nos cuenta la revista Entre Montañas, no se puede practicar rafting en todos sitios. Para ello existen tramos de ríos habilitados para su descenso. Estos tramos están categorizados en función de su nivel de dificultad.
Para practicar el rafting es necesario ir acompañado por un monitor o tripulante que conozca el recorrido y que tenga experiencia suficiente para poder sortear cualquier imprevisto. Si practicamos este deporte con una empresa de actividades de montaña no tendremos este problema, ya que la actividad suele estar dirigida por guías expertos.
Las principales zonas de rafting de España se encuentran en el norte del país: Galicia, Asturias y Cantabria, si bien podemos encontrar tramos de río preparados para este deporte dispersos por todo el país.
La práctica irregular del rafting está perseguida por el Seprona, una división especial de la Guardia Civil que trabaja en el ámbito natural, ya que se considera una acción temeraria.
El senderismo.
Si hablamos de deporte en la naturaleza, no solo vamos a tratar las experiencias más intensas. Curiosamente, el senderismo es el deporte al aire libre que más adeptos tiene en nuestro país. Según una encuesta sobre hábitos deportivos encargada por el gobierno en el 2022, más de 8 millones de personas practican el senderismo y el montañismo con cierta regularidad en España.
El senderismo consiste en recorrer los espacios naturales utilizando los caminos y vías pecuarias que tradicionalmente el hombre ha utilizado para moverse por el entorno natural.
La práctica del senderismo mejora la salud física en general. El hecho de caminar al aire libre, en espacios sin polución, oxigena todo nuestro organismo y mejora la circulación de la sangre. Este deporte de baja intensidad fortalece nuestros músculos y articulaciones y aumenta nuestra resistencia.
El senderismo se ha convertido también en un medio de interacción social. Un ámbito en el que conocer gente nueva en un ambiente sano y relajado que predispone a la colaboración y a la interacción social. Prácticamente, todos los grupos de singles que hay en nuestro país suelen programar excursiones de senderismo.
Para el aficionado al senderismo, la práctica de este deporte despierta su curiosidad por descubrir espacios nuevos. Por eso no es extraño que muchos de ellos se recorran parte del país para conocer de primera mano los parajes naturales más bellos.
Lo mejor de todo es que tenemos rutas de senderismo por todo el territorio nacional, perfectamente documentadas en páginas web especializadas y en libros de viajes.
El segway.
El segway es uno de los vehículos de transporte que más llama la atención en algunas actividades programadas de montaña. Se trata de un vehículo motorizado, generalmente eléctrico, con dos ruedas paralelas unidas por un eje, en la que el usurario se sube de pie sobre un soporte y se sujeta con las manos a un manillar donde están localizados los controles.
Los segways que se utilizan en la montaña están preparados para este uso. Utilizan neumáticos especiales de gran agarre y un motor con una mayor potencia. A bordo de estos aparatos, los turistas pueden recorrer rutas de senderismo y de mountain bike sin apenas realizar esfuerzo.
Una forma de conocer los parajes naturales viviendo una experiencia que como menos resulta chocante y novedosa.
El segway fue inventado por el ingeniero norteamericano Dean Kamen en el 2001. En su primera década de fabricación se convirtió en el vehículo de seguridad y orden público más utilizado en todo el mundo.
Los servicios de seguridad de los aeropuertos los incluyeron dentro de su equipamiento y muchos departamentos de policía local los adquirieron como medio de transporte para sus agentes a pie de calle.
Se ideó en un principio como un medio de transporte para moverse por la gran ciudad. Parece que en este sentido, los patinetes eléctricos le han comido el terreno. Sin embargo, con el tiempo se han descubierto nuevas utilidades para estos dispositivos. El desplazamiento por la montaña una de las más interesantes.