La educación es la base para construir una sociedad en continuo avance. Los cimientos sobres los que deben erigirse las diferentes culturas, posibilitando el desarrollo de la persona a nivel individual y colectivo. Dotar de conocimientos a todas las personas que componen una sociedad, para que se encuentren en igualdad de condiciones, es clave para el progreso y el desarrollo social. Nuestro compañero el Preparador de oposición de primaria online, como profesional docente, comparte ese pensamiento: educar para formar personas e impulsar la sociedad desde la edad temprana. Cuanto antes se empiece a proporcionar el conocimiento, mayor capacidad de comprensión se adquiere.
Educar no consiste en pasar lecciones de materias como las matemáticas, la lengua o la química. Educar o recibir educación es adquirir conocimientos, enriquecer la cultura, cultivar el espíritu y los valores que nos caracterizan como seres humanos. La educación es primordial y esencial en todos los sentidos, el académico y el social.
Para lograr el objetivo de igualdad, debe existir un plan educativo acorde con las pretensiones y que no discrimine. Todos los alumnos deben ir al mismo nivel e ir avanzando de forma gradual. Un buen sistema educativo es necesario para cumplir ese objetivo.
En España hemos tenido ya unos cuantos planes de educación que han ido cambiando con el paso del tiempo y merced a las circunstancias. Desde que se implanto la Educación General Básica, más conocida como E.G.B., han sido muchas las reformas y planes educativos que han vivido los estudiantes. Antes de la E.G.B., la enseñanza media en España no tenia demasiado peso, por lo que este nuevo sistema educativo, supuso un cambio en la concepción de la educación, siendo obligatoria y gratuita para todos.
Tras la E.G.B., llegó la LOGSE y posteriormente la LOE que tuvo una última modificación en la LOMSE. Estos sistemas educativos, han ido sufriendo cambios y variaciones con la finalidad de convertirse en un sistema educativo completo, actual y con una extensa oferta formativa. Es cierto que la oferta cada vez es mayor y más diversa, pero ¿recibimos una buena formación dentro de este sistema educativo?
Un sistema con varios niveles
Evidentemente, la educación no puede ser lineal. Debe ser estructurada y constar de diversas etapas que contemplen la evolución desde el inicio de la edad escolar. En España, la educación es una competencia que comparten Estado y comunidades autónomas, donde el Estado, determina cual es la estructura general de ese sistema educativo disponiendo la tipología, los niveles, cursos, requisitos para el acceso, etc. Los contenidos educativos para esa estructura, se determinan entre Estado y comunidades autónomas. Como ya sabemos, en España no solo se habla el castellano, son cuatro las lenguas oficiales del país. Siendo en aquellas que cuentan con lengua propia un cincuenta y cinco por cien de los contenidos a cargo del Estado y en las que solo hablan castellano un sesenta y cinco.
Actualmente, el sistema educativo patrio se regula y define por dos leyes: la Ley Orgánica de Educación (LOE) de 2006 y la Ley Orgánica de Modificación de la LOE (LOMLOE) de 2020. Esta última introduce cambios respecto a la LOE.
Este sistema educativo se organiza en etapas, cursos y niveles que aseguren una correcta transición entre las mismas y dentro de cada una de ellas. La estructura de la que se compone es la siguiente:
- Educación Infantil.
- Educación Primaria.
- Educación Secundaria (ESO).
- Bachillerato.
- Formación Profesional (FP).
- Enseñanzas universitarias.
- Enseñanzas de régimen especial.
La gestión y financiación del país, permite hacer una diferencia entre los centros educativos, a razón de su titularidad. Esto permite abarcar una mayor oferta educativa en todos los niveles, a la hora de decidirse por un lugar para cursar las enseñanzas dispuestas en el plan de educación.
En primer lugar, encontramos los centros públicos, laicos y financiados por la Administración. En ellos se imparten la mayoría de los niveles de educación básica y obligatoria que comprenden desde infantil hasta Formación Profesional, pasando por Primaria, ESO y Bachillerato. Cuenta con un número de plazas limitado y los criterios de admisión los determina la Administración.
En segunda instancia, podemos encontrar centros educativos privados, cuya financiación procede de las familias de los alumnos. Cuentan con libertad de gestión y el número de plazas y requisitos de accesos dependen directamente de cada centro.
Por último, encontramos los centro educativos concertados que, aun siendo privados, cuentan con subvenciones parciales por parte de la Administración. Su financiación corre por cuenta de las subvenciones y las cuotas que pagan las familias de los alumnos. Disponen de gestión propia, aunque el número de plazas y su calendario escolar lo determina la Administración.
La elección del centro educativo, es algo personal o circunstancial de cada familia que debe valorar o contemplar las diferentes opciones y posibilidades. En cualquier caso, en nuestro país, la formación pública y la privada se encuentran en el mismo nivel por lo que no hay que preocuparse por que la educación pública sea inferior o la privada superior.
Las etapas del sistema
Veamos con más detenimiento, las diferentes etapas educativas de las que se compone el sistema educativo en España.
El primer contacto de los pequeños con el sistema educativo, se lleva a cabo en la etapa infantil que comprende desde los cero a los seis años. Esta etapa, denominada Educación Infantil, es de carácter voluntario y se divide en dos ciclos: de cero a tres años, se realiza en escuelas infantiles y de tres a seis, la educación se imparte en centros de educación y primaria. Esta primera etapa educativa, tiene la finalidad de contribuir al desarrollo cognitivo, físico, social, afectivo y moral de los niños desde el principio.
A partir de los seis años, la educación se convierte en algo obligatoria y gratuito a lo que todo niño tiene derecho hasta que cumpla los dieciséis años. La Educación Primaria, se inicia a los seis años y está comprendida por tres ciclos de dos años cada uno: inicial, de seis a ocho; medio, de ocho a diez; y superior de diez a doce. El objetivo de esta etapa educativa, es fomentar el desarrollo de las diferentes capacidades de niños y niñas, expresión y comprensión oral, socialización para su autonomía progresiva y conocimientos básicos para poder avanzar en su formación.
Para concluir la enseñanza obligatoria, la ESO (Educación Secundaria Obligatoria), incluye cuatro cursos escolares que van desde los doce a los dieciséis años, prorrogable hasta los dieciocho años en caso de que el alumno repita curso. En esta etapa la pretensión es dotar a los alumnos de conocimientos básicos de la cultura y desarrollen hábitos de estudio y trabajo a la vez que adquieren un pensamiento crítico.
Finalizada esta etapa, los alumnos, pueden cursar estudios de Bachillerato o Formación Profesional de grado medio o acceder al mercado laboral.
El Bachillerato pertenece a la educación secundaria postobligatoria y comprende dos cursos académicos que se cursan normalmente entre los dieciséis y los dieciocho años. Esta etapa cuenta con cuatro modalidades que tienen la finalidad de capacitar a los alumnos para poder acceder a la educación superior. Las ramas existentes son Ciencias y Tecnología, Humanidades, Ciencias Sociales y General.
La Formación Profesional capacita a los alumnos para el desempeño de diferentes profesiones y se encuentra dividida en tres niveles:
- Básica para los alumnos que no han finalizado la ESO y quieren continuar su camino en el ámbito de la Formación Profesional y que se incluyen dentro de la educación básica y gratuita pues suponen una alternativa para obtener el titulo de Graduado en ESO.
- Ciclos de grado medio, que al igual que el Bachillerato, forman parte de la educación secundaria postobligatoria y duran dos años, tras los que se obtiene el título de Técnico y permite acceder a ciclos de grado superior.
- Ciclos de grado superior que forman parte de la educación superior, duran dos años y confieren el título de Técnico Superior permitiendo el acceso a los estudios universitarios.